domingo, 4 de julio de 2010

Pautas de crianza


Esta semana leía en uno de los blogs relacionados con las pautas de crianza de los hijos y coincidí con la respuesta de uno de sus lectores quien argumentaba según respuestas textuales lo siguiente “Pienso que los padres tenemos los hijos que nos merecemos, es la construcción de nuestros miedos y conflictos, traumas no resueltos, los hijos a veces se convierten en una reeditación de historias familiares de sus padres que no han sido elaboradas. No hay la formula perfecta, todo lo que dicen los libros es solo una aproximación a ser unos buenos padres, y no los padres buenos que los adolescentes demandan.”
Es cierto que muchos padres no nos tomamos la tarea de asumir responsabilidad, “Asumimos que somos buenos padres” y que nunca nos equivocamos, podemos hacer surcos y sembrar la semilla, como argumentaba otra lectora, pero; quién me garantiza que mis enseñanzas y ejemplos son buena tierra y que está bien abonada? Los hijos son seres independientes, con emociones, pensamientos y deseos propios, se alimentan de nuestros ejemplos pero en últimas son ellos quienes deciden que camino tomar. De no ser así, Qué otro camino le quedaría aquellos que crecen en hogares disfuncionales, pero que deciden romper con aquellos valores negativos? Porque los hay muchos.
En una ocasión atendí a una familia muy afligida porque su hijo menor de 18 años quien era el “Capo” de una pandilla muy peligrosa. Sus padres siempre dieron muy buen ejemplo, así lo confirmaron sus 4 hermanos mayores, pero el joven argumentó; “no es justo que mis viejos hayan sido honestos, trabajadores, dieron buenos hijos y que ahora vivan su vejez llenos de necesidades” a él no le interesó sus lagrimas y angustia por su forma de pensar y de actuar, ignoró que por ser el menor vivió con menos carencias económicas que los mayores ya que ellos le apoyaron siempre. Pero según él, lo hacia para dar una mejor vida económica a sus padres.
En el proceso se identificó que tampoco se le dio todo tan fácilmente y tuvo los limites necesarios en su edad rebelde, recibió los castigos adecuados a su edad cuando cometía una falta. Lo que los medios y su contexto le mostraron fue más atractivo para él, le molestaba la pasividad y conformidad del más necesitado y decidió hacer lo que hizo, según él. Se sentía mejor así.
Pueden haber muchos factores que expliquen esto, pero hubo que hacer un gran acompañamiento para que esta familia se liberara de su culpa y aceptara que en ultimas también es responsabilidad del propio sujeto decidir. Esto para los padres que sienten que han hecho un buen trabajo pero que las normas sociales son indiferentes para sus hijos.
Y para cerrar, yo le pediría a cada miembro en la familia que busque, investigue desde diversos ángulos, que significa la palabra – DIALOGO.

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